Guzmán cuenta su historia de un modo autobiográfico, como es propio de todas las novelas picarescas españolas desde la perspectiva de una persona que ha llegado a la comprensión y al mismo tiempo alterna la trama y la contemplación instructiva. Guzmán no sabe con seguridad quién es su padre. Como casi todos los pícaros, desciende de un origen perturbado y un día decide abandonar a su familia en Sevilla. Totalmente ingenuo y sin armas para defenderse del mundo, inmediatamente siente la dureza de no tener un hogar. Tiene muchos problemas al principio, pero logra adaptarse muy pronto. De un tabernero Madrileño aprende a engañar a los clientes. Desde este momento gana su dinero gracias a la ratería, pero lo pierde sucesivamente - castigo y nueva infracción al mismo tiempo - a causa del juego. Como criado de diferentes patrones, a los que roba considerablemente, llega a Toledo, Almagro, Génova. Aquí sus parientes le tratan con frialdad. Finalmente llega a Roma, donde llega a convertirse en uno de los ladrones más vivos de su tiempo.

Sin embargo, conforme a la intención moral del autor, Guzmán es engañado una y otra vez. Trata de ser feliz en el amor, pero las mujeres no lo toman en serio y se burlan de él.

3º-4º ESO

1º-2º BAC